La malaria es una enfermedad infecciosa provocada por la introducción del parásito Plasmodium en el torrente sanguíneo del infectado, tras la picadura de mosquitos hembra infectados del género Anopheles.

Este tipo de parásitos, los esporozoítos, alcanzan las células del hígado, donde se reproducen muy rápido, hasta el momento en el que las rompen, siendo liberados a la circulación sanguínea en forma de merozoítos. Pero, ¿cómo afecta realmente la malaria al hígado?

¿Qué daños causa la malaria en el hígado de los infectados?

En los últimos años, han sido muchos los estudios que señalan los problemas hepáticos causados por la malaria, el papel de la hiperbilirrubinemia en la respuesta del huésped y los mecanismos de protección hepática frente al paludismo.

Sin embargo, todavía no se han hallado importantes evidencias que confirmen un elevado grado de afectación de la malaria al hígado, a pesar de ser el primer órgano de invasión y replicación del parásito[i].

Por el contrario, sí que existen determinados signos de peligro que indican que la malaria tiene una alta probabilidad de volverse complicada y poder derivar en una posible malaria cerebral, o ser una evidencia de que ya lo sea. Es el caso de la ictericia.

¿Qué relación guardan la ictericia y la malaria complicada?

Si hablamos de cómo afecta la malaria al hígado, es importante resaltar que la ictericia es una de las manifestaciones más comunes de malaria complicada.

Según la Organización Mundial para la Salud, la incidencia de ictericia en pacientes con paludismo se sitúa entre el 10 y el 45% de los casos en todo el mundo[ii].  La variabilidad dependerá de la especie de Plasmodium y la época del año.

Generalmente, la ictericia en el paciente infectado por malaria es un signo de lesión hepática y de gravedad, que se traduce en la coloración amarillenta de la piel debido al aumento de la bilirrubina. Esta sustancia es tóxica para las células renales, por lo que existe un alto riesgo de necrosis tubular.

En menor frecuencia, deben tenerse en cuenta otras causas como la hemólisis, es decir, la destrucción de los glóbulos rojos. Normalmente, la hemólisis indica disfunción hepática, lo que podría provocar la alteración de otros órganos del infectado.

¿Qué explica la aparición de ictericia en el paciente con malaria?

• Daño hepático: el daño hepático está implicado en la acumulación de bilirrubina, lo que puede desembocar en una obstrucción vascular. El falciparum, causante del 90% de las muertes por malaria, se caracteriza por formar protuberancias en la superficie de los glóbulos rojos, lo que permite su adhesión a las monocapas que separan los tejidos de la sangre de las venas hepáticas. Esta adhesión de las células infectadas de parásitos provoca daño microvascular y obstruye la circulación de los vasos sanguíneos del hígado.
• Hemólisis: la hemólisis vascular se produce por la destrucción de los glóbulos rojos parasitados y no parasitados. Se da, principalmente, en aquellos casos de infección por falciparum, quien puede invadir eritrocitos en todos los estadios, ocasionando su ruptura masiva para liberar merozoítos, lo que le permite producir elevadas parasitemias.
• Otras infecciones asociadas: la ictericia y la fiebre son síntomas comunes en otras infecciones que producen lesiones en el hígado, y que pueden darse simultáneamente con la malaria como la hepatitis viral, fiebre amarilla o fiebre tifoidea, por lo que debe hacerse un diagnóstico diferencial[iii]. Asimismo, la enfermedad hepática crónica por virus de hepatitis B es un factor de riesgo para infección palúdica grave, lo que puede desembocar en una disfunción hepática.
• Falta de glucosa-6-fosfato deshidrogenasa (G6PD): aunque esta deficiencia puede ser un factor protector contra el desarrollo de malaria grave o cerebral, la malaria no grave y la ingestión de medicamentos antimaláricos en pacientes con esta deficiencia, pueden provocar una hemólisis masiva[iv].

[i] http://www.scielo.org.co/pdf/inf/v14n4/v14n4a06.pdf
[ii] https://www.who.int/malaria/publications/atoz/who-severe-malaria-tmih-supplement-2014.pdf
[iii] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/14557843/
[iv]http://www.bioline.org.br/request?rc04042#:~:text=La%20hem%C3%B3lisis%20intravascular%20ha%20sido,1.